martes, 24 de marzo de 2015

Celebrar fin de año un 13 de enero


En el año 1582, el Papa Gregorio XIII introdujo un nuevo calendario, conocido desde entonces como Calendario Gregoriano. Este calendario sustituía al antiguo Calendario Juliano promovido por Julio César. La diferencia era mínima pero significativa: el antiguo Calendario Juliano consideraba el año de 365,25 días y por lo tanto, para compensarlo, cada cuatro años en el mes de febrero se añadía un día. El Calendario Gregoriano era más exacto ya que consideraba un año de 365,2425 días. Esto hacía que cada 4 años hubiera un febrero de 29 días excepto los años terminados en doble cero (1600, 1700, ...).



Sin embargo, después de 15 siglos de uso del Calendario Juliano, el error que este calendario había acumulado llegaba ya a los once días. Es decir, aunque la noche más corta del año siempre sea la del 23 de junio, por culpa del Calendario Juliano, la noche más corta del año se producía realmente el 4 de julio! Con el cambio de calendario se decidió, de paso, solucionar este desfase acumulado. Aquel 1582, los países católicos tuvieron un mes de Octubre muy peculiar: al día siguiente del jueves 4 de Octubre vino el viernes 15 de Octubre!

Pero en los países protestantes, este nuevo Calendario Gregoriano se interpretó como un intento de la iglesia católica de volver a recuperar el poder religioso sobre sus iglesias. Después de años de guerras de religión, ambas partes aún estaban bastante susceptibles!

Así pues, los países protestantes y ortodoxos tardaron varios años en adoptar el nuevo calendario. En algunos casos, como Rusia o Grecia hicieron el cambio ya en el siglo XX En el caso del Imperio Británico, sin embargo, "sólo" se esperaron hasta 1752. Es decir, 170 años en los que, al cruzar el Canal de la Mancha tenías que atrasar el calendario 11 días!

El mismo Calendar Act de 1750 que regulaba el cambio de calendario fue ratificado por Inglaterra y Escocia. Pero como, por cada ley del Reino Unido, siempre hay un lugar que hace una excepción, el Calendar Act no fue ratificado en todas partes. Esta excepción, a día de hoy todavía sigue utilizando el Calendario Juliano. Este sitio está, además, considerado el punto más remoto del Reino Unido: la Isla de Foula. Si llegáis a Foula desde las vecinas Islas Shetland, tenéis que retrasar vuestro calendario 12 días y, por tanto, cuando el 25 de diciembre celebran el día de Navidad, el resto del mundo ya está en 6 de enero, y cuando para ellos es Nochevieja, en Barcelona ya es 13 de enero!



Foula es una pequeña isla de 6 Km. de largo y 4 Km. de ancho formada por altos acantilados y cubierta de prados verdes situada en medio del Mar del Norte. La isla pertenece a las Islas Shetland, a medio camino entre Escocia y Noruega. Es decir, que Foula es la isla más remota de todas las remotas Islas Shetland.


Hay dos núcleos de población: Hametown y Ham, pero de hecho, las casas están dispersas por la isla, y los núcleos de población se consideran allí donde están los puntos neurálgicos, como el pequeño puerto, la oficina de correos o el aeródromo. Ham es el único punto de toda la isla donde podemos encontrar un poco de playa, ya que el resto de costa son acantilados. Y no lo digo para buscar un lugar donde poder bañarse; estamos en pleno Mar del Norte y el agua ya es gélida .... en verano! La presencia de una playa minúscula es lo que ha permitido a los habitantes de Foula construir un puerto. Este puerto, sin embargo, es de dimensiones tan reducidas, que las embarcaciones son izadas a tierra cuando no se utilizan, para que el puerto no quede bloqueado.


Durante los años 60, una serie de semanas con el mar en muy malas condiciones, impidieron que el ferry que une el minúsculo puerto de Ham, y las islas Shetland pudiese hacer la travesía. Al cabo de 3 meses sin ferry, los suministros y víveres comenzaban a disminuir dramáticamente, y el gobierno británico optó por hacer un vuelo arriesgado para llevar suministros de socorro. El avión, un viejo avión de transporte de los años 40, debía aterrizar en uno de los prados de la isla, del que previamente se habían apartado las ovejas, claro. Con lo que no se contaba es que, después de tantos días de mal tiempo, el suelo de estos prados estaba empapado de agua. Al tocar tierra, las ruedas delanteras del avión se hundieron en ese fango y el avión volcó. No hubo heridos y los suministros llegaron en buen estado, pero la tripulación se tuvo que quedar en Foula 3 semanas más hasta que el ferry pudo, por fin, alcanzar a la isla. Esto llevó a la decisión de construir una pista de aterrizaje que permitiera aterrizar con garantías en Foula. Bueno, todas las garantías que puede ofrecer una pista corta y sin asfaltar!


En la isla viven aproximadamente unas 38 personas. Digo aproximadamente porque algunos de sus habitantes sólo pasan temporadas o, por ejemplo, los niños, cuando hacen 11 años, son enviados a Lerwick, capital de las Shetland, para estudiar secundaria. Antiguamente, la población había llegado a más de 200 habitantes pero, durante el siglo XX, la falta de oportunidades para los habitantes, y la dureza de las condiciones de vida, hicieron que la población declinara poco a poco.



Y qué hacen esta gente viviendo aquí? La isla ha sido poblada desde el Neolítico y, durante estos picos de población que os mencionaba, en que se llegaba a los 200 habitantes o más, la malnutrición debía ser importante, ya que se considera que el suelo es muy poco fértil. Además, el aislamiento de la población creaba una situación de endogamia que, unida a la malnutrición, y la falta de contacto con el exterior provocaban que los habitantes de Foula fueran muy vulnerables a enfermedades. Por ejemplo, durante el siglo XVIII llegó a la isla un brote de viruela. Los habitantes de la isla no habían estado nunca en contacto con esta enfermedad y, por tanto, eran muy vulnerables; la totalidad de la población enfermó, y muchos de ellos murieron.

Ahora, sin embargo, todo esto ha cambiado: aunque hay un porcentaje importante de la población que son descendientes de los antiguos habitantes de la isla, ha venido gente de fuera, especialmente de las Shetland o del norte de Escocia. y también las condiciones de vida han mejorado mucho, de modo que las épocas de penurias ya forman parte del pasado.


Una peculiaridad de la población de la isla queda patente a la hora de rellenar una de esas encuestas en que te preguntan la profesión: los habitantes de Foula suelen tener 4 o 5 trabajos. En una comunidad tan pequeña, hay muchas tareas que hacer, y entre todos hay que hacer que todo funcione. Por ejemplo, tenemos a Peny Gear que, a sus 38 años tiene las siguientes profesiones: campesina, criadora de ponis, limpiadora de la escuela, supervisora ​​del comedor escolar, bombera del aeropuerto y guía para observar pájaros. O Amy Ratter, que con 32 años se encarga de su granja, es la responsable de mantener las bombas que dan suministro de agua a la isla y además, es bombera. Pluriempleo en grado superlativo!


Con este vídeo os podéis hacer una idea de lo que significa que la treintena de habitantes de la isla tengan que ocuparse de todas las tareas de la comunidad:



Pero lo que ha cambiado el futuro de la isla ha sido el turismo. De entrada hay un atractivo que, aunque os pueda sorprender, lleva muchos visitantes a la isla: la ornitología. La isla de Foula, además de ser el hogar de una treintena de personas, también está habitada por unos 50.000 pájaros, especialmente charranes árticos, colimbos y frailecillos.



Aparte de los pájaros, la isla ofrece un ambiente de recogimiento y tranquilidad y está muy bien preparada para acoger un número limitado de turistas. Los habitantes hacen de guías turísticos y muestran con orgullo como era la vida tradicional de la isla. Y en cuanto a la "infraestructura hotelera", se han creado alojamientos tipo Bed & Breakfast, gestionados por los habitantes de la isla. Algunos, como es el caso del Burns Cottage, tienen un encanto innegable!


La isla de Foula tiene además otra peculiaridad que, en este caso es lingüística: fue el último lugar donde se habló un idioma llamado Norn!

Os cuento: entre los siglos VIII y XV, es decir durante unos 700 años, Foula y el resto de las islas Shetland, así como las islas Orkney, situadas más al sur, pertenecieron a la corona noruega. Cuando los colonos vikingos llegaron a las Shetland, trajeron con ellos su idioma, el Norse (el origen de todas las lenguas escandinavas) y que, con el tiempo derivó en un idioma propio de las islas Shetland y Orkney que, incluso, se llegó a hablar en el norte de Escocia. Este idioma, el Norn, era similar al actual Faroés o Islandés. Cuando en el año 1468, las islas pasan a soberanía de la corona escocesa, el Norn es el único idioma que se habla en la isla. Poco a poco, sin embargo, el Norn va siendo sustituido por el Scots (no confundir con el Gaélico escocés), que es el idioma hermano del inglés, y que se habla en las tierras Bajas de Escocia. Durante los siglos XVII y XVIII, el Norn fue desapareciendo de las islas Shetland, pero resistió en Foula y en la vecina Unst hasta el siglo XIX, en que desapareció definitivamente.


La influencia nórdica en las islas fue muy importante: sólo hace falta que os fijéis en la bandera de las Islas Shetland, formada por una cruz nórdica (llamada también cruz de San Olaf) con los colores escoceses. Hoy en día, todavía se cantan algunas canciones tradicionales en Norn, y es muy común que los habitantes de las Shetland, tengan nombres de origen Norn o, por ejemplo, que el lema que acompaña el escudo de las Shetland, esté escrito en Norn.


viernes, 20 de marzo de 2015

A 7.000km de Stamford Bridge

En general, el Ártico ruso no pasa por su mejor momento. A principios del siglo XX, con la llegada al poder del comunismo en Rusia, se forzó a todas las poblaciones del Ártico, Nenets, Chukchi, Yakutia, yupik,... a convertirse en sedentarias, colectivitzar y demás paranoias soviéticas. En resumen, fueron obligados a dejar su estilo de vida tradicional para pasar a formar parte de las masas proletarias. Evidentemente, esto no se sostenía por ningún lado porque, si los Nenets eran pastores de renos nómadas en un entorno con inviernos a -45º, era pura y simplemente por adaptación al medio. Las nuevas ciudades soviéticas en el Ártico se podían mantener o bien porque había una explotación minera, una base militar o porque el lugar tenía "importancia geoestratégica" durante la guerra fría.




Pero cuando la Unión Soviética colapsó, las explotaciones mineras dejaron de ser rentables, las bases militares no se podían mantener, y en cuanto a la "importancia geoestratégica" se puede decir que, ni era "importante" ni siquiera había "estrategia". Así pues, todas estas poblaciones se vaciaron de gente, y los que se quedaban lo hacían rodeados de miseria y crisis. Las comunidades nativas habían, en muchos casos, olvidado las formas de vida tradicionales, y no podían recuperar un estilo de vida que les hubiera permitido subsistir en un entorno tan extremo.



Hay, sin embargo, una zona del Ártico ruso que ha podido invertir esta tendencia de manera un tanto rocambolesca; y justamente es la más lejana y remota, y también una de las más frías: El Distrito Autónomo de Chukotka .

Chukotka es el distrito más oriental de la Región Siberiana llamada Región del Extremo Oriente. De hecho es la punta de Rusia que se encuentra mirando a Alaska, sólo separada por el Estrecho de Bering y, por tanto, a unos 30km de territorio Norteamericano. Para que os hagáis una idea, Chukotka está a mucha menos distancia de San Francisco o Los Ángeles que de Moscú.


La gente de etnia Chukchi son los habitantes originales de la región. Aunque a primera vista podrían parecer parientes de los Inuits (los mal llamados esquimales), no tienen nada que ver ni genéticamente ni culturalmente. El idioma Chukchi es uno de los llamados idiomas Paleo-Siberianos ya que se sabe que están en Siberia desde tiempos inmemoriales, pero no se conocen ni el origen ni el parentesco. Ahora, sin embargo, los Chukchi no son mayoría en su tierra, ya que la emigración de rusos (entre otras etnias) durante la época soviética convirtió los Chukchi en una minoría.


En la actualidad, entre chukchis, rusos y todos los demás, apenas llegan a los 51.000 habitantes para poblar una región que es tan grande como Francia y Gran Bretaña juntas! De ellos, casi 15.000 viven en la capital, Anadyr, y el resto se reparten por unos cuanto pueblos aislados. El problema de vivir en un entorno donde durante 6 meses al año puedes tener temperaturas por debajo de los -30º es que las infraestructuras son muy difíciles de construir. Es por ello que en Chukotka, prácticamente no hay carreteras, y todos los movimientos se realizan en avión. Incluso para ir desde el aeropuerto de Anadyr hasta el centro de la ciudad no hay carretera como tal: durante el verano se cruza el río con un ferry, y durante el invierno puedes conducir por la carretera que se crea sobre el hielo del río.




Con esto os he situado en cuanto a Chukotka, pero ahora vamos con lo que quería contar. Con el fin del mandato del primer presidente (más o menos) democrático de Rusia, Boris Yeltsin, algunos de los oligarcas rusos que habían hecho fortuna con las privatizaciones de empresas estatales, cogieron miedo a ser llevados ante los tribunales por delitos económicos. Uno de ellos era un conocido de los aficionados al fútbol: Roman Abramovich, el dueño del Chelsea FC. El amigo Roman es la 5ª fortuna de Rusia, y ocupa la 50ª posición entre las personas más ricas del mundo. Hizo su fortuna mediante una empresa petrolífera, las privatizaciones, y las triquiñuelas propias de los países corruptos. El nuevo presidente, Vladimir Putin, aconsejó a Roman Abramovich que, para ahorrarse problemas, necesitaba tener un cargo electo, y así conseguir la inmunidad parlamentaria que le permitiría dormir tranquilo.


En el año 2.000, un grupo de ejecutivos de grandes empresas de Alaska se reunieron con Roman Abramovich y le hablaron de las "grandes posibilidades" de desarrollo que tenía la región de Chukotka. Era un trato bueno para todos: Abramovich conseguía la inmunidad y, al mismo tiempo, podía hacer negocios con las empresas de Alaska, muy interesadas por su lado, en poner un pie en una región que tenían cerca, pero a la que siempre se les había impedido la entrada. Sólo había una obstáculo, pero: Chukotka ya tenía un gobernador, y no tenía ninguna intención de dejar el cargo. Alexander Nazarov era el gobernador de Chukotka desde el 1.988 y actuaba en la región como un dictador, manteniendo la sociedad anclada en el más duro estalinismo mientras que (se sospecha) él y sus secuaces desviaban fondos públicos para comprarse propiedades en EE.UU.


Curiosamente, la autoridad fiscal rusa abrió una investigación contra Nazarov justo antes de las elecciones (mira que es curioso el azar, ¿verdad?). El "Pequeño Stalin" se vio obligado a retirarse y Roman Abramovich ganó las elecciones con más del 90% de los votos. Bueno, y ahora qué? Es necesario que el Gobernador viva en el territorio gobernado? Cuando se dispone de una mansión en el barrio londinense de Chelsea y uno de los yates más lujosos del mundo, la respuesta estaba cantada: ¡No!

Un representante del Ayuntamiento de Providenie, un pueblo costero de Chukotka, recuerda la primera vez que Abramovich visitó el pueblo: Acababan de sufrir una época de gran escasez, incluso alimentaria, debida a una ola de frío tan dura que había hecho imposible cualquier aprovisionamiento de suministros o víveres. El pueblo estaba en una situación deplorable, y Roman Abramovich hizo una visita en helicóptero. Se entrevistó con los responsables municipales y a continuación se volvió a subir al helicóptero. Antes de despegar dio la siguientes instrucciones: Había que construir inmediatamente en Providenie una nueva escuela, una central eléctrica, una clínica, y casas nuevas para los habitantes. Y así se hizo! La otra cosa que pidió antes de despegar con el helicóptero fue una botella de vodka, pero no para beber sino ... para desinfectarse las manos!

Pero sea como fuere, la inversión que hizo durante aquellos 4 años en Chukotka fue impresionante. Invirtió dinero público, y el dinero de su fortuna personal! Hasta 925M € de su bolsillo invertidos en infraestructuras, escuelas y hospitales en el distrito de Chukotka. Hasta que llegó el año 2005; final de mandato. Abramovich ya estaba cansado de jugar a "Melchor, Gaspar y Baltasar visitan Siberia" y decidió no volverse a presentar al cargo de Gobernador. Pero he aquí que recibió una llamada del Presidente Putin. No se sabe qué argumentos utilizó, pero le convenció para que se presentara a la reelección. Debo seros franco; a mí, si me llama Putin, con esa pinta de asesino frío y despiadado (recordad que era Mayor del KGB), me convence de lo que él quiera!

Total, que la gente de Chukotka tuvo Abramovich durante 4 años más. Bueno, sería más exacto decir: votaron Abramovich por 4 años más y, y tanto si lo votaron!! Ganó con un 97% de los votos. Y es que Roman Abramovich es prácticamente una deidad en Chukotka! Finalmente en 2009 plegó como Gobernador aunque aseguró que mantendría todas las inversiones particulares que había hecho. Y cuál ha sido el resultado? Pues que en 8 años el PIB de la región se ha doblado, los ingresos de los habitantes se han triplicado, y el sueldo medio de los trabajadores se ha multiplicado por 5. Se han hecho escuelas y hospitales nuevos, se han construido cientos de viviendas nuevas y se han rehabilitado un número similar. Se ha reconstruido completamente el aeropuerto de Anadyr, que ahora sería equiparable al aeropuerto de cualquier pequeña ciudad europea. En resumen, Chukotka ha cambiado completamente.
 
Y aparte de la inmunidad parlamentaria para Abramovich, cuál ha sido el precio que ha tenido que pagar la gente de Chukotka para tener esto? Pues de entrada que la actividad minera y petrolífera haya quedado controlada por las empresas de Abramovich o las que él ha designado (os acordáis de unos "desinteresados​​" ejecutivos de empresas de Alaska ... acertásteis!). Pero, sinceramente, viendo la dictadura a la que habían sido sometidos la gente de Chukotka (y especialmente la gente de etnia Chukchi), y la miseria del resto del Ártico Ruso, ya me perdonaréis pero.... Donde hay que firmar?

En la actualidad, en la era Post-Abramovich, Chukotka quiere continuar prosperando. Aparte de la ya consolidada actividad minera y petrolífera, ahora intenta también orientarse hacia el turismo ecológico. Lo tienen difícil, porque la infraestructura hotelera es mínima: 3 hoteles en Anadyr y para de contar. Pero el paisaje y los parajes naturales de que dispone Chukotka bien valen este esfuerzo! Tundra y bosque siberiano, naturaleza en estado salvaje, uno de los aires más puros del mundo y una fauna impresionante. Esperemos que lo consigan, pero la parte más difícil del camino ya lo han hecho, con la ayuda (totalmente interesada!) del dueño del chealse FC.



Por cierto, así como los Inuits o los Nenets nos han legado préstamos lingüísticos como las palabras Parka o Anorak, los Chukchi también han contribuido con.... un perro! Seleccionando los cachorros más fuertes y resistentes, los Chukchi crearon la raza de perros llamada Husky Siberiano !


domingo, 15 de marzo de 2015

El jardín del Sr. Rodionov


Por la mañana, al Señor Rodionov le gusta beber un café apenas se ha levantado. Si la temperatura lo permite, sale al porche de su casa con la taza de café para poder mirar su jardín y, si hace demasiado frío, desde dentro de casa, lo observa a través de la ventana.




El jardín de Anatoly Rodionov tiene unas dimensiones considerables: 150 km de largo y 125 km de ancho. Y es que el señor Rodionov es la única persona que vive durante todo el año en la isla de Wrangel, situada en el extremo oriental del ártico ruso.


La isla de Wrangel debe su nombre al explorador ruso, el Barón Ferdinand von Wrangel, que hizo tres expediciones a la isla (1821, 1822, y 1823) y en ninguna de las 3 ocasiones fue capaz de encontrarla. No fue hasta 1867 en que un ballenero norteamericano, Thomas Long, al descubrir la isla le puso el nombre del pobre Barón fracasado. Decimos que Thomas Long la descubrió, pero sería más correcto decir que la descubrió para los occidentales; los Chukchi, los autóctonos de la costa siberiana más cercana a la isla Wrangel, conocían la isla desde siempre. Finalmente, a principios de siglo XX, los rusos reclamaron como suya la isla Wrangel, estableciendo un asentamiento durante los años 20, y una base militar del Ejército Rojo durante los 60's.


Fue precisamente durante los años 20 que la isla fue protagonista de una operación de rescate que duró 4 años! En 1926, los soviéticos enviaron una expedición a la isla con víveres para 3 años. La llegada a la isla fue relativamente fácil ya que, durante el verano, el hielo había permitido la navegación hasta Wrangel. Lo que no sabían los expedicionarios es que aquel verano, el mar había estado anormalmente libre de hielo. Durante los siguientes años, el hielo impidió el acceso de cualquier barco, y en 1929, 4 años después del desembarco, se sospechaba que los expedicionarios deberían estar en una situación dramática, o incluso muertos de inanición y frío. Se organizó una nueva expedición de rescate con un barco rompehielos, el Fyodor Litke al que, más que "rompehielos" deberíamos llamar "cortahielos". En lugar de romper el hielo por encima, como hacen normalmente todos los rompehielos, el Fyodor Litke tenía una proa afilada que cortaba el hielo como si fuera un cuchillo.


En septiembre de 1929, el "cortahielos" Litke conseguía llegar a Wrangel después de innumerables vicisitudes y rescatar, en unas condiciones dramáticas, aunque todavía vivos, todos los expedicionarios llegados a la isla en 1926. Esa hazaña convirtió los expedicionarios y los tripulantes del Fyodor Litke en unos de los primeros héroes soviéticos del ártico.

Y llegamos al año 1976, donde comienza la historia con la que empezábamos este post: el señor Anatoly Rodionov. Aquel año, el gobierno soviético designó la isla Wrangel como Reserva Natural. No es que los rusos tuvieran una gran conciencia ecológica; pensad que tanto el asentamiento como la base militar ya habían sido abandonados, y Wrangel no podía ofrecer ningún tipo de recurso. Así pues, se prohibió el acceso a la isla y se designaron un grupo de guardas o "rangers" para vigilar la isla y proteger su flora y fauna.


Anatoly Rodionov pertenece a la última de estas promociones de Rangers y, actualmente, es el único de los 4 Rangers de la isla que pasan todo el año. Los otros 3 Rangers sólo pasan unos cuantos meses, normalmente para acompañar las expediciones científicas que llegan a la isla durante el verano. El bueno de Anatoly vive su trabajo con pasión y un alto grado de responsabilidad. Tan grande es su sentido del deber que, cuando su mujer lo puso ante el dilema: "la familia o el trabajo", el Ranger eligió Wrangel! Como son las mujeres! A quién se le ocurre no querer vivir aislados en una isla de tundra ártica con temperaturas de -50º y rodeados de focas y osos polares!


Entre las funciones de Anatoly, está el control y conteo de la fauna salvaje, acompañar turistas y expediciones científicas y, además, otra muy particular. Anatoly Rodionov se encarga, con mucha paciencia, de ir desguazando los escombros y desechos que quedaron tras el desmantelamiento de las bases militares. Poco a poco, este hombre va cortando, separando y apilando toda la chatarra que quedó atrás cuando se fueron los militares: blindados, camiones, barracas y bidones. Durante años y años se ha encargado de evitar derrames contaminantes, y minimizar el impacto de los desechos a medida que limpia y apila. Recuerdáis la película de animación del robot Wall-e? Pues Rodionov es el Wall-e de la isla Wrangel!


La isla es el paradigma de lo que es la tundra. Kilómetros y kilómetros de llanuras y colinas donde sólo crecen hierba, musgo y algún pequeño arbusto. La fauna es una muestra de lo que habían sido las estepas heladas de Eurasia: zorros y lobos árticos, focas y morsas, bueyes almizcleros, gran cantidad de pájaros árticos y, sobre todo osos polares. De hecho, es el punto del planeta con mayor densidad de osos polares!



Lo más curioso de todo es que, por el hecho de estar en el extremo, noreste del continente euro-asiático, la isla de Wrangel se ha convertido en el último reducto de especies que se han ido extinguiendo paulatinamente de Europa y Asia. El caso más sorprendente es el del mamut. Sí, el elefante peludo de la prehistoria! En la isla Wrangel vivieron los últimos ejemplares de mamut hace sólo 4.000 años; es decir, subsitieron aislados en Wrangel durante 6.000 años después que estos paquidermos desaparecieran de Europa. Para que os hagáis una idea: En Egipto ya iban por la 11ª dinastía de los faraones, y en Wrangel aún vivían mamuts!


Ahora sin embargo, por desgracia, los delirios megalómanos del actual presidente ruso, Vladimir Putin, han hecho que vuelva a haber movimiento en la isla de Wrangel. El año pasado se inauguró una nueva base militar, consistente en una serie de barracones prefabricados y un aeródromo. Las aspiraciones rusas en el ártico han provocado que Anatoly Rodionov no pueda tomar su café de la mañana tan tranquilo como hace un tiempo!


Paralelamente, la isla también se ha abierto a un turismo controlado. Se pueden hacer cruceros como el de Heritage Expeditions para visitar la isla y conocer su fauna a bordo de un barco científico. Si os interesa ya podéis correr porque, por lo que se ve, quedan pocas plazas para 2015!

Sobre la isla de Wrangel también hay una dramática leyenda de la que no se sabe si es verdad o no. Durante la segunda guerra mundial, el conocido diplomático sueco Raoul Wallenberg salvó miles de judíos de Budapest de los campos de exterminio nazis. Cuando los soviéticos liberaron la capital húngara, Wallenberg desapareció misteriosamente y nunca más se supo. Aunque formalmente nunca hubo ningún campo de prisioneros soviético en Wrangel, algún judíos rusos que emigraron a Israel han declarado que estuvieron recluidos en Wrangel y que coincidieron con Wallenberg a principios de los 60. Pero eso ya son misterios que probablemente quedarán enterrados bajo el hielo de la isla Wrangel para siempre!

Esta entrada no habría sido posible sin la inestimable ayuda de Jordi Fontbuté. Gracias por la idea y las fuentes!


jueves, 12 de marzo de 2015

El mapa lingüístico definitivo

Aunque ya hace unos meses que salió la versión "Beta", ahora, por fin, aparece la versión definitiva de Langscape, el mejor mapa lingüístico interactivo. Esta aplicación web ha sido desarrollada básicamente por el Maryland Language Science Center, una institución de la Universidad de Maryland que agrupa a más de 200 científicos de diferentes áreas vinculadas al lenguaje y la lingüística. Además, como partners han contado con lo mejor del "mundillo" lingüístico. Queda claro que en Estados Unidos van a lo grande!


Y en qué consiste? Pues en un mapa interactivo del mundo vinculado a una base de datos de más de 6.400 idiomas. Si tenemos en cuenta que se calcula que en el mundo se hablan entre 7.000 y 10.000 idiomas (depende de cómo se cuenten) significa que gran parte de las lenguas de la Tierra está representadas.

Situaros en el punto de la Tierra que deseéis y, cuando hagáis click, aparecerán las coordenadas del punto, y todos los idiomas que se hablan en ese punto preciso del mundo. Por ejemplo, si se situáis sobre el Valle de Arán os aparecerán, lógicamente, el castellano, catalán y aranés:



De cada idioma podréis obtener datos del tipo: número de hablantes, distribución, variantes dialectales, .... La base de datos proviene, básicamente, de The Ethnologue, la fuente online más extensa sobre geolingüística y, considerada por los expertos como "La Biblia Lingüística ".

En el apartado "Discover" también encontraréis una página para comprobar vuestras capacidades para reconocer idiomas. Elegid alguno de los temas (lenguas más habladas, idiomas de Europa, lenguas de Siberia, ...) y el nivel de dificultad. Oiréis grabaciones habladas y tenéis que marcar a qué idioma se corresponde. A ver cómo se os da!

martes, 10 de marzo de 2015

Khoisan, las lenguas impronunciables


En el sur de África hay un conjunto de lenguas llamadas lenguas Khoisan. Son un conjunto de familias que no están relacionadas genéticamente entre ellas (es decir, no provienen de una misma lengua común) pero que, en cambio, todas ellas comparten un rasgo muy característico que descubriréis un poco más adelante.

Aunque hace siglos, las lenguas Khoisan eran predominantes en la mitad sur del continente africano, la expansión de etnias y lenguas Bantú, arrinconaron todos estos idiomas Khoisan de forma que, actualmente, todos los idiomas juntos apenas alcanzan los 300.000 hablantes distribuidos en 5 familias:
  • Lenguas kxoe (unas 10 lenguas): supone el grupo más numeroso de hablantes entre las lenguas Khoisan, ya que las hablan unas 250.000 personas en zonas de Namibia, Sudáfrica, Botswana y Zimbabwe.
  • Lenguas Tuu (unas 7 lenguas, la mayoría extinguidas): Esta familia, que en el mapa sale como lenguas Taa) está en una situación muy comprometida ya que, de los 7 idiomas, sólo 2 están vivos en la zona de Botswana y Sudáfrica; el !xoo con 4.500 hablantes, y el NIIng con sólo 5 hablantes vivos!
  • Lenguas K'xa (en el mapa como lenguas Ju), formada por 2 idiomas con unos 18.000 hablantes en Namibia y Angola. Uno de estos 2 idiomas es el !Kung que podréis oírr después.
  • Lengua Sadawe: una sola lengua aislada hablada por 45.000 personas en Tanzania.
  • Lengua Hadza: también una lengua aislada que ya sólo hablan 800 personas en Tanzania y que parece que podrían estar relacionados con los pigmeos.


Habréis notado que he escrito nombres de idiomas como !Kung, !Xoo o NIIng. No, no es que sea poco diestro con el teclado (bueno, sí, reconozco que escribo sólo con un dedo de cada mano, pero lo hago bastante bien), es que la peculiaridad de todos estos idiomas son un grupo de consonantes llamadas "Consonantes click". Todas las lenguas Khoisan tienen, como mínimo, una Consonante Click. Algunas lenguas, sin embargo, tienen muchas de Consonantes Click, como el Nama, de la familia khoe, que tiene 31 consonantes, de las cuales 20 son Click, y el resto normal.

Y qué es una Consonante Click? Bueno, aquí tenéis un amigo que os lo explicará muy claramente (subid el volumen del vídeo...)



Este hombre es de la etnia San. Antiguamente se les conocía como bosquimanos, pero este nombre es extremadamente despectivo, del mismo modo que no se puede llamar "esquimales" a los Inuit ...!

Como decía, este hombre es de etnia San y habla en idioma !Kung. ¿Os habéis dado cuenta de los sonidos que hace chasqueando los labios (como cuando nosotros hacemos el sonido de desaprobación tsk! tsk!) O bien haciendo "click" con la lengua en el paladar? Todo esto son consonantes de su idioma. Por esto tienen que añadir símbolos a la escritura (por ejemplo para escribir su propio idioma, !Kung).

Además, las lenguas Khoisan influyeron en idiomas vecinos e hicieron que la "peculiaridad" de las Consonantes Click Khoisan se extendiese también a 3 idiomas del grupo de lenguas Bantús: el Zulú, el Phuthi y el Xhosa. Esto ha hecho que las Consonantes Click tengan ahora muchos hablantes ya que el Zulú (Sudáfrica) tiene 10 millones de hablantes, el Phuthi (Lesotho) tiene 20.000 y el Xhosa (Sudáfrica) tiene más de 7 millones de hablantes. Sin embargo no se consideran lenguas Khoisan ya que han adoptado las Consonantes Click por influencia de otro idioma.
 
Para que oigáis mejor los sonidos de las Consonantes Click, fíjaros en este vídeo; Khaya Dlanga habla Xhosa, y os enseñará a pronunciar algunas Consonantes Click. Ah, por cierto, para que os situéis, el Xhosa es el idioma materno de personalidades como Desmond Tutu, o Nelson Mandela.



Queda claro que la cosa no es fácil y que se requiere mucha, muchísima práctica para poder hablar algún idioma con Consonantes Click!

Os dejo otro video para que os pongáis a prueba. En éste, Khaya Dlanga os enseñará a decir, en Xhosa, los números del 1 al 10. Si alguien es capaz de pronunciar el número "7" correctamente, le invito a una cena !



Pero todavía se puede complicar más! Si, si, esto sólo son las primeras lecciones! Sois capaces de decir rápido aquello de "Un tigre, dos tigres, tres tigres..."? Pues en Xhosa también tienen sus trabalenguas. Os atrevéis ?



Para terminar, os dejo el link a la tabla (con sonido) de todas las Consonantes Click que existen en el mundo.

lunes, 9 de marzo de 2015

Siguiendo la Cruz del Sur con Su Graciosa Majestad (y 5)

Estamos a las puertas de la Antártida. El periplo siguiendo la Union Jack por el Atlántico Sur toca a su fin y, la proximidad a la Antártida, hace de esta última parada un lugar bastante inhóspito. Estamos en la isla Georgia del Sur: frío, nieve, ballenas, y el descenso en trineo más dramático de la historia!


La isla de Georgia del Sur está a unos 1.400km al este de las Islas Falklands. Sola, aislada en medio del Océano, en un punto ( 54ºS ) que oficialmente aún se considera "el sur del Atlántico". Pero sinceramente, viendo un mar de color gris oscuro, temperaturas glaciales y las olas de los "furiosos cincuenta", formalmente será el Atlántico o el que quieran, pero en realidad la isla parece en pleno Océano Antártico.

La isla es alargada y estrecha; aunque tiene más de 160km de punta a punta, de ancho apenas llega a los 35 km, pero es que además, es extremadamente montañosa: 11 picos por encima de los 2.000m, y de los cuales uno, el Monte Paget, se acerca a los 3.000m. Es como si bajaras el Aneto y al pie te encontraras la playa!


Y quien vive aquí? Pues prácticamente nadie. Bueno, nadie es originario de Georgia del Sur, pero hay quien vive por "motivos profesionales". Dejadme que os explique la (poca) historia de la isla y entenderéis el porqué:

La isla fue avistada ya en el siglo XVII por navegantes británicos y españoles. James Cook dio la vuelta a la isla ya bien entrado el siglo XVIII y más tarde, la isla sirvió como base temporal para la caza de focas. A principios del siglo XX, un noruego, Carl Anton Larsen estableció en la isla la primera base permanente para la caza de ballenas. A pesar de estar en el Atlántico Sur y en territorio británico, Larsen puso un nombre bien noruego al asentamiento: Grytviken. Con los años, aparecieron otros asentamientos más o menos grandes por la isla: Stromness, Husvik ... Alguien definió estos asentamientos como "osarios gigantes hirviendo en vaselina", debido a las condiciones en que se trataban y procesaban las ballenas cazadas. Otras "evocadoras" palabras hacían referencia a los trabajos de procesamiento de las ballenas y los "fétidos vapores que emanaban, mezcla de olor nauseabundo de pescado pasado, basuras y curtido de pieles"!


En los años 60 cerraron las últimas estaciones balleneras que aún estaban en funcionamiento y la isla quedó habitada sólo por un destacamento científico en los alrededores de Grytviken. Pero como os contaba en el post anterior, cuando en 1982 los argentinos invadieron las Falklands, ya que estaban puestos, también se apoderaron de Georgia del Sur o, como ellos la llaman, Isla San Pedro (con esta manía de poner nombres tétricos o del santoral los nuevos descubrimientos). Cuando los británicos los echaron, dejaron en King Edward Point, cerca de Grytviken, un destacamento que, en la actualidad, varía entre las 15 personas en invierno y 30 en verano.


Los cruceros turísticos que se dirigen hacia la Antártida suelen hacer una breve escala en Grytviken. Los turistas, cuando bajan del crucero, pueden visitar la antigua estación ballenera con la mayoría de sus edificios destartalados, y los pocos que todavía están en condiciones, como la iglesia, o el museo de Grytviken. El otro punto turístico en Grytviken es el cementerio. La mayoría de tumbas corresponden a trabajadores de la estación ballenera, pero hay una tumba en la que no hay enterrado ningún ballenero, y que hace que los turistas que visitan Grytviken peregrinen con devoción para rendir allí homenaje. Y la razón es que en Grytviken está enterrado Sir Ernest Shackleton!



Me permitiréis, pues, que la segunda parte de este post lo dedique a relatar una de las aventuras más épicas de toda la exploración polar, y que ha hecho que Shackleton sea una de las figuras a quien más admiro.

"Se buscan hombres para viaje peligroso. Salario escaso , frío intenso, largas horas de oscuridad. Pocas opciones de volver sano y salvo. Honor y reconocimiento en caso de éxito"

Este es "el atractivo" anuncio que se publicó en un periódico de Londres para reclutar personal para la expedición que el experimentado Sir Ernest Shackleton organizaba para 1914. Llamada "Expedición Trans-Antártica Imperial", se proponía cruzar la Antártida desde uno de los extremos hasta el otro, pasando por el Polo Sur.


28 hombres se dirigieron hacia el Mar de Weddell, en la Antártida, a bordo de un barco llamado, premonitoriamente, Endurance (resistencia). La última escala del barco antes de dirigirse a la Antártida fue en Georgia del Sur, en Grytviken, el 5 de noviembre de 1914. A partir de ahí, las cosas se empezaron a torcer: un verano antártico con una excepcional cantidad de hielo dejó encarcelado el Endurance entre la banquisa. El barco ya no se podía gobernar y se movía hacia donde lo llevaba el movimiento del hielo. En varias ocasiones intentaron liberarlo abriendo pasos entre el hielo; pero las jornadas extenuantes sólo les permitían avanzar unos pocos cientos de metros mientras que el hielo era capaz de desplazar el barco unas cuantas millas sin esfuerzo.


La tripulación pasó el verano antártico de 1914-1915 con el barco atrapado en el hielo, pero entre risas, carreras de trineos y partidos de fútbol sobre la nieve, las semanas discurrieron sin que el riesgo que corrían se hiciese notar. Cuando, en marzo de 1915, Shackleton se dio cuenta de que les tocaría pasar el invierno antártico igualmente atrapados (y en la oscuridad más absoluta), hizo cambiar la rutina a toda la tripulación. Se trataba de mantenerlos ocupados para evitar perder la moral haciendo ejercicio, entrenamientos, cuidando los perros y manteniendo todo el equipamiento en perfecto estado. Aún así, la mayor parte de los días los pasaron encerrados dentro del barco mientras leían, escuchaban música o representaban obras de teatro mientras afuera la noche antártica se alargaba durante semanas.


Por desgracia, en septiembre de 1915, con la llegada de la primavera, el hielo se volvió a mover, pero en lugar de liberar el barco, comenzó a comprimirlo. La madera del casco del Endurance crujía y gemía como si de una tortura se tratara y los días posteriores se comenzó a inclinar. El 27 de Octubre, la situación era tan precaria que Shackleton dio la orden de abandonar la nave. Se quitó todo el equipamiento, suministros, comida, municiones y todo lo aprovechable y se montó un campamento sobre el hielo, junto al moribundo barco. Cuando el barco se hundió, el objetivo de la "Expedición Trans-Antártica Imperial" se abandonó; el nuevo objetivo era volver a casa sanos y salvos. Tras darse cuenta de que difícilmente la deriva del hielo los conduciría hacia la dirección deseada, optaron por avanzar andando. Se cargó todo el material posible sobre las tres barcas que se habían salvado del Endurance y comenzaron a caminar sobre el hielo tirando de los botes y todas sus pertenencias.


Las crestas de hielo formadas por la presión de la banquisa hacían que avanzaran penosamente . En 3 días lograron avanzar 3 kilómetros. En otras ocasiones, todo lo que caminaban no servía de nada debido a que la deriva del hielo los conducía en dirección contraria. Hacía más de un año que habían zarpado de Grytviken. Durante aquel febrero de 1916, la comida comenzó a escasear y Shackleton se vio obligado a ordenar que se sacrificasen los perros, ya que consumían demasiada comida. La deriva del hielo les había alejado de los primeros objetivos: la tierra firme de la Antártida o Paulet Island. El movimiento del hielo les había llevado demasiado hacia el norte y ahora sólo quedaban dos opciones: Clearence Island o Elephant Island.


La noche del 8 de abril de 1916, mientras los 28 hombres dormían, el hielo bajo sus pies se abrió sin avisar; de pronto, el banco de hielo se convirtió en mar y tuvieron el tiempo justo para poner las tiendas y los víveres encima de los botes. Remaron durante tres días seguidos hasta divisar Elephant Island. La costa de la isla, sin embargo, estaba llena de rocas y tratar de acercarse era un suicidio que probablemente acabaría con las barcas quebradas entre las rocas. El 14 de abril, los hombres estaban exhaustos; llevaban días sin dormir ni prácticamente comer, y Shackleton optó por arriesgarse. No tenía otra opción que intentar un desembarco en la isla y, por suerte, un día más tarde, uno de los botes descubrió una pequeña playa que les permitiría desembarcar. Era la primera vez en 18 meses que pisaban tierra firme.


Pero qué tierra firme! Elephant Island era una roca helada alejada de cualquier ruta marítima y que sólo podía ofrecer a los hombres del Endurance frío, humedad, rocas y pingüinos! Era necesario, pues, salir de aquella isla. Con las corrientes marinas de la zona, la única posibilidad era una travesía loca de 1.300km hasta la isla Georgia del Sur. Pero con un riesgo: si la navegación no era perfecta y no acertaban la dirección exacta de la isla; es decir, si se pasaban de largo Georgia del Sur, ya no había nada más: el Océano Atlántico y, a más de 2.500km, las costas de Sudáfrica. Había pues que acertar y sólo tenían una posibilidad ya que no podían dar media vuelta debido a que la corriente es demasiado fuerte para navegar en contra.


Después de 14 días de navegación con olas de hasta 10 metros, los 6 hombres a bordo del bote James Caird, comandados por Shackleton mismo, avistaron Georgia del Sur y desembarcaron en una pequeña caleta. Pero como "las desgracias nunca vienen solas", les quedaba llegar hasta un lugar habitado y Stromness o Grytviken estaban al otro lado de la isla. Era imposible circunnavegar la isla ya que las fuertes corrientes los hubieran enviado al Océano abierto. Era necesario, pues, cruzar la isla andando. Shackleton seleccionó dos hombres para acompañarlo y empezaron a trepar montaña arriba por una isla que nunca había sido cartografiada y, mucho menos, atravesada. Caminaron todo el día subiendo montañas nevadas con unos zapatos y ropa de abrigo prácticamente inexistentes. Shackleton obligó a sus dos compañeros a caminar también durante la noche, ya que sabía que si se dormían, ya no volverían a despertarse. A la mañana siguiente, el 21 de mayo de 1916, sintieron la sirena de Stromness que convocaba a los trabajadores de la estación ballenera a iniciar la jornada.


Ahora sólo había que descender los 500m de desnivel hasta la cala donde estaba la estación ballenera Stromness. Los tres hombres estaban agotados, con síntomas de congelación, deshidratados y bordeando la pérdida de conocimiento. En un último arrebato de lucidez, Shackleton dijo a sus compañeros que se sentaran en el suelo y se dejaron deslizar ladera abajo como si bajaran en trineo. En cinco minutos avanzaron lo que les hubiera costado una agotadora jornada y que, en el estado en que se encontraban, no podían afrontar.

Imaginaros que deberían pensar los trabajadores de Stromness al ver aparecer de la nada tres hombres barbudos, vestidos como mendigos y que avanzaban tambaleándose! Al día siguiente, Ernest Shackleton empezaba a organizar el rescate de los hombres que se habían quedado atrás: en primer lugar se recogieron los tres hombres que habían quedado al lado del bote James Caird al otro lado de la isla Georgia del Sur. Posteriormente rescató a los 22 hombres que habían quedado en Elephant Island esperándolo y sin saber si había conseguido llegar a Georgia del Sur.



Después de casi 20 meses de periplo, Sir Ernest Shackleton había conseguido sacar con vida de aquella prisión blanca todos y cada uno de sus hombres. "La Expedición Trans-Antártica Imperial" había sido un fracaso pero Ernest Shackleton había subido a los altares de la exploración polar.
 
Durante los años posteriores, convertido en una celebridad en el Reino Unido y en todo el mundo, Ernest Shackleton se dio cuenta de que la vida de lujos y recepciones no estaba hecha para él. Se inventó una nueva expedición antártica con un objetivo muy indefinido. Convocó a los hombres del Endurance a los que había sacado del hielo, y una gran mayoría respondieron a su llamada. Hacia donde se dirigían, cuál era el objetivo o el salario eran lo de menos. Sabían que irían allí donde Sir Ernest Shackleton los llevara.


El 5 de enero de 1922, con el Quest, el barco de la nueva expedición, entrando en la bahía de Grytviken, en Georgia del Sur, Ernest Shackleton sufrió un ataque al corazón fulminante. Fue enterrado en el cementerio de Grytviken. En 2011 se trasladaron al cementerio las cenizas de Franck Wild, su leal lugarteniente, que había acompañado a Shackleton en todas las expediciones y que, desde ese día, descansa junto a aquel gran explorador a quien todos sus compañeros de fatigas llamaban "The Boss".


Con este homenaje al gran Ernest Shackleton y la visita a Georgia del Sur, se termina la serie sobre las posesiones británicas en el Atlántico Sur.

Para leer con más profundidad las vicisitudes de Shackleton y el Endurance, os recomiendo dos magníficos libros: La prisión blanca (Alfred Lansing) y Atrapados en el hielo (Caroline Alexander).